Playa Las Ánimas: Una Escapada que Combina Selva, Mar y Tradición

En la vasta colección de playas que abrazan la Costa Sur de Puerto Vallarta, Las Ánimas ocupa un lugar especial. Se trata de un lugar donde el mar cristalino se encuentra con la arena dorada, y donde la experiencia de llegar se convierte en parte esencial de la aventura.

UN VIAJE QUE COMIENZA EN EL MAR

El acceso a Las Ánimas solo es posible por bote o panga, lo que le confiere un aire de exclusividad y encanto. Desde Boca de Tomatlán, un pintoresco pueblo de pescadores ubicado a unos 30 minutos en auto desde el centro de Puerto Vallarta, zarpan embarcaciones constantemente. Otra opción es abordar una panga en el icónico Muelle de Playa Los Muertos, en la Zona Romántica, y dejar que el recorrido por la Bahía de Banderas (con vistas a la exuberante selva y al perfil montañoso de la Sierra Madre) prepare el espíritu para la llegada a este paraíso.

PLAYA, GASTRONOMÍA Y ENCANTO LOCAL

Ya en la playa, el visitante descubre el principal atractivo de Las Ánimas: sus restaurantes sobre la arena. Estos establecimientos, sencillos y auténticos, ofrecen una experiencia gastronómica que combina la frescura del mar con el sabor de la tradición. Pescados y mariscos recién capturados se transforman en ceviches, cócteles, pescados zarandeados o camarones al gusto, servidos con el relajado sonido de las olas como telón de fondo. Comer en Las Ánimas no es solo alimentarse, es abrazar el estilo de vida costero en su máxima expresión.

UN ESPACIO PARA LA NATURALEZA Y EL DESCANSO

La amplitud de la playa invita a caminar descalzo sobre su arena dorada, perfecta para largas caminatas que regalan tranquilidad y perspectiva. Para quienes buscan prolongar la experiencia, Las Ánimas ofrece la posibilidad de acampar de manera responsable, convirtiendo la noche en una oportunidad para contemplar un cielo despejado, libre de contaminación lumínica, donde las estrellas parecen multiplicarse infinitamente.

UN DESTINO PARA DISFRUTAR EL DÍA

Las Ánimas es, ante todo, un lugar para vivir el presente. Perfecto para pasar un día de descanso y desconexión, esta playa combina aventura, gastronomía y serenidad en un mismo escenario. Entre paseos en bote, tardes de sol y atardeceres inolvidables, este refugio al sur de Puerto Vallarta ofrece un recordatorio claro: el verdadero lujo está en los lugares donde la naturaleza sigue dictando el ritmo de la vida.